Masaje de relajación

Te ayudará a relajarte y aliviar algunas de las molestias habituales durante el embarazo, te sentirás más liviana y descansarás mejor por las noches.
Recibir un buen masaje terapéutico también ayuda a aliviar algunos de los molestos síntomas de embarazo tales como lumbago, calambres, dolor de las articulaciones, etc.

Los beneficios de hacerlo son muchos. Además de reducirse los dolores en la espalda y las molestias en los hombros, se proporciona paz al sistema nervioso. Esto permite reducir los niveles de ansiedad, sintiéndote más animada y con muchas más ganas de disfrutar del proceso que está viviendo.
Podemos recibir masajes desde el primer momento que sepamos que estamos embarazadas, aunque se recomienda por seguridad, hacerlo a partir del tercer mes de gestación.
Las posiciones que más se utilizan son recostada de un lado, con las rodillas flexionadas y con cojines o almohadas entre las piernas, o sentada en una silla de masajes donde tu espalda queda completamente libre para recibir el masaje.
Se recomienda realizarte un masaje de relajación prenatal cada quince días, y hacia el final del embarazo al menos una vez a la semana. El masaje puede ser en todo tu cuerpo, o sólo en tu espalda. Todo depende de la posición que elijas.

NacerMamá
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